En la guardería "El Congreso Teletubbie" los peques han tenido hoy una discusión sobre sus cosas, esas que los mayores no entendemos nunca por mucho que nos esforzamos. Y es que ya se sabe que los niños tienen su propio lenguaje, que entre ellos se entienden, pero que en realidad se pueden pasar horas y horas sin decir realmente nada, pero ellos se quedan como si todo lo que dijeran fuese realmente importante.
Y ahora en serio... ¿Habéis escuchado en el debate Sobre el Estado de la Nación algo que os resulte útil de verdad? ¿Algo que solucione vuestros problemas? ¿Habéis visto en alguno de los intervinientes el más mínimo interés por enviar mensajes a la ciudadanía que ésta pueda comprender y tranquilizarse?
Son pajas. Inmensas, largas y tediosas pajas que se hacen sus señorías, A veces solos, a veces entre ellos. Es una orgía de masturbaciones sin fin, en la que ellos se lo pasan pipa, pero nadie saca satisfacción de lo que haga el otro. Y nosotros menos. Nosotros no podemos ni cascárnosla.
Mañana habrá más. Y se supone que nos tiene que interesar. Nueva ración de "y tú más", nuevas dosis de "herencias recibidas" o de "sobres negros". Ya está bien... ya está bien.
Disuelvan esa farsa, dennos a los ciudadanos la ocasión de decirles lo que pensamos ahora mismo, que no es lo mismo que hace catorce meses, que los ciudadanos somos así y los votantes del PP ya no son tantos... y los del PSOE serán más, pero no suficientes. Aprendan la lección de democracia que les queremos dar, pero para eso tienen que renunciar a su status actual, a su posición de privilegio absolutista...
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