Vaya por Dios, hombre... Para una vez que un ministro nos quiere dar una alegría, aunque no se la creía ni él mismo, viene el Montoro y la tiene que cagar. Ya nos veíamos todos los españoles multimillonarios el año que viene gracias a la bajada de impuestos de la que nos hablaba De Guindos, pero... nuestro gozo en un pozo...
Si es que a perro flaco todo son PPePPeros. A ver, en realidad yo no me creo nada, ¿vale? Eso de que un ministro de Economía diga lo contrario a lo que va a decir más tarde el ministro de Hacienda me huele a maniobra para que nos creamos que, en el fondo, alguno de ellos tiene buen corazón. pero es que para eso haría falta algo que es imposible: que tengan corazón, bueno o malo.
En fin... Que seguimos pobres, que nadie nos va a bajar nada, que nuestros sueldos seguirán siendo de los más bajos y nuestros impuestos de los más altos... Que la vida continúa y que, como dijo el poeta... "los sueños, sueños son".
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