Dimitir no vas a dimitir, Feijoó, eso lo sabemos todos. Y que digas que estás dispuesto a pedir disculpas me vale lo mismo que si te vas de copas o de putas. Estamos cansados ya de políticos y reyes que sólo saben pedir perdón, que pensáis que somos eternamente pacientes, que nada nos importa y que podéis hacer lo que os plazca porque nuestro perdón está garantizado.
Y no lo está, lo que ocurre es que no podemos hacer nada, porque vivimos una democracia en la que el pueblo no puede hacer que sus gobernantes se marchen, sólo que lleguen. Y desde el momento en el que os instaláis todo se terminó, la democracia y la vergüenza.
Y a tí ya te la trae floja, Alberto... tú estás sentado donde te han puesto, no se si los votantes, los narcos o la iglesia católica... ni me importa. Pero yo quiero poder decirte que no te quiero, y quiero que si te decimos lo mismo el 51% de la población gallega te marches. Pero el 51% de la población gallega tendremos que esperar a las siguientes elecciones para decírtelo. Y entonces, ¿qué quieres, querido Alberto? ya será demasiado tarde. Ya tendremos otro motivo más para que el resto de España crea que somos idiotas los gallegos...
En fin... como ni me leerás esto ni te importaría lo más mínimo si lo leyeras... que te den por el culo, Alberto. (Soy gallego, ¿qué queréis? No doy para más).
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Absoluta libertad de opinión, pero no olvides que es mi blog, y yo todavía no te he faltado al respeto... Gracias por participar.